El movimiento de protesta es motivado en los despidos injustificados y la persecución sindical, que se viene dando por parte de la Gerencia de esta entidad bancaria en contra de empleados y activistas.
En el departamento de Risaralda, han salido 14 empleados de planta del banco popular y el propósito es tercerizar los servicios, para disminuir costos de funcionamiento en detrimento de la estabilidad laboral.